Imagina un bar oscuro y elegante, inspirado en la atmósfera intrigante y sofisticada de la serie Peaky Blinders. El diseño debe evocar la esencia del Birmingham de los años 20, con una estética industrial que mezcla elementos de época y toques modernos. Paredes de ladrillo desgastado, tuberías expuestas y detalles en hierro forjado complementan el ambiente, mientras que la iluminación cálida y tenue crea un aura de misterio. Los muebles son de cuero envejecido, con sofás Chesterfield profundos y sillas de madera oscura que invitan a largas conversaciones al lado de una barra imponente, hecha de madera maciza y decorada con detalles en cobre y vidrio. Botellas de whisky de alta gama y cristalería vintage adornan las estanterías, mientras que carteles antiguos y arte de la época completan el look. El personal, vestido con trajes de tres piezas y boinas, añade autenticidad, sumergiendo a los clientes en la época de gánsteres y contrabando. La música jazz y blues suena de fondo, complementando una carta de cocteles clásicos con un toque audaz y contemporáneo. Este bar encapsula el estilo y la rudeza de la era, creando un refugio donde los asistentes pueden sentirse parte de la historia.