Fachada renovada: revestimientos contemporáneos como concreto expuesto, paneles de madera, piedra natural y vidrio. Añadir ventanales amplios y modernos. Entradas y terrazas: rediseñar la entrada con iluminación cálida y paisajismo minimalista. Crear una terraza con barandas de vidrio y mobiliario exterior moderno. Techos y líneas arquitectónicas: introducir techos planos o inclinados con líneas limpias y un diseño asimétrico. Colores: aplicar una paleta de colores neutros y sofisticados, como blanco, gris, negro y madera natural. Jardinería: añadir jardines verticales, maceteros integrados y plantas ornamentales. Iluminación: incorporar iluminación LED empotrada para resaltar texturas y detalles. El resultado debe ser una vivienda moderna, funcional y visualmente atractiva, que destaque como un diseño completamente renovado.