LA SEรORITAS DE MONTERA
Capรญtulo 1: La Madam
En la vibrante y caรณtica calle Montera de Madrid, donde las luces de neรณn luchan contra la oscuridad de la noche, se alza un burdel conocido como "Las Seรฑoritas de Montera". Esta calle, un microcosmos de la sociedad madrileรฑa, estรก llena de vida y contrastes. Durante el dรญa, Montera es un bullicio de gente, con turistas admirando los escaparates y locales apresurados en sus quehaceres diarios. Pero cuando el sol se pone y las sombras se alargan, la calle se transforma en un escenario de luces intermitentes y figuras furtivas.
El burdel es una edificaciรณn de varias plantas, su fachada exterior en tonos apagados, casi disimulados, pero una vez que se cruzan sus puertas, el interior es un mundo distinto. Las paredes estรกn decoradas con terciopelo rojo y cuadros de mujeres desnudas, evocando una mezcla de lujo decadente y tristeza silenciosa. La lรกmpara central, hecha de finos cristales traรญdos de todo el mundo, cuelga majestuosa del techo, s
LA SEรORITAS DE MONTERA
Capรญtulo 1: La Madam
En la vibrante y caรณtica calle Montera de Madrid, donde las luces de neรณn luchan contra la oscuridad de la noche, se alza un burdel conocido como "Las Seรฑoritas de Montera". Esta calle, un microcosmos de la sociedad madrileรฑa, estรก llena de vida y contrastes. Durante el dรญa, Montera es un bullicio de gente, con turistas admirando los escaparates y locales apresurados en sus quehaceres diarios. Pero cuando el sol se pone y las sombras se alargan, la calle se transforma en un escenario de luces intermitentes y figuras furtivas.
El burdel es una edificaciรณn de varias plantas, su fachada exterior en tonos apagados, casi disimulados, pero una vez que se cruzan sus puertas, el interior es un mundo distinto. Las paredes estรกn decoradas con terciopelo rojo y cuadros de mujeres desnudas, evocando una mezcla de lujo decadente y tristeza silenciosa. La lรกmpara central, hecha de finos cristales traรญdos de todo el mundo, cuelga majestuosa del techo, s