Un edificio escultórico abstracto que reinterpreta la forma de un árbol de Navidad con un enfoque contemporáneo y brutalista. La estructura combina hormigón, cristal y acero, presentando un diseño audaz y geométrico que destaca por sus líneas angulosas y volúmenes entrelazados.
En el interior, una iluminación cálida envuelve el espacio, creando un contraste fascinante con la frialdad de los materiales y el entorno nevado que lo rodea. Las ventanas de cristal, dispuestas estratégicamente, permiten vislumbrar un interior acogedor y sofisticado, donde se utilizan acabados de madera natural y textiles suaves para equilibrar la robustez de la estructura.
El edificio se encuentra ubicado en un parque urbano, donde su silueta monumental y su estética brutalista resaltan contra el blanco invernal del paisaje. En el exterior, caminos cubiertos de nieve y bancos minimalistas de acero negro ofrecen un espacio para que los transeúntes contemplen la imponente arquitectura. La combinación de luces doradas en el interior y los reflejos del cristal en el exterior crea un efecto visual que evoca tanto modernidad como la magia de las festividades.
Un edificio escultórico abstracto que reinterpreta la forma de un árbol de Navidad con un enfoque contemporáneo y brutalista. La estructura combina hormigón, cristal y acero, presentando un diseño audaz y geométrico que destaca por sus líneas angulosas y volúmenes entrelazados.
En el interior, una iluminación cálida envuelve el espacio, creando un contraste fascinante con la frialdad de los materiales y el entorno nevado que lo rodea. Las ventanas de cristal, dispuestas estratégicamente, permiten vislumbrar un interior acogedor y sofisticado, donde se utilizan acabados de madera natural y textiles suaves para equilibrar la robustez de la estructura.
El edificio se encuentra ubicado en un parque urbano, donde su silueta monumental y su estética brutalista resaltan contra el blanco invernal del paisaje. En el exterior, caminos cubiertos de nieve y bancos minimalistas de acero negro ofrecen un espacio para que los transeúntes contemplen la imponente arquitectura. La combinación de luces doradas en el interior y los reflejos del cristal en el exterior crea un efecto visual que evoca tanto modernidad como la magia de las festividades.