Diseña un espacio interior minimalista y moderno que refleje una atmósfera cálida y acogedora. La escena debe incluir un sofá de dos plazas con tapizado gris claro y estructura de madera clara, colocado contra una pared de paneles de madera verticales en tonos cálidos de roble. Frente al sofá, sitúa una mesa de centro de diseño contemporáneo hecha de piedra speckled en tonos grises y blancos, con una superficie texturizada. Sobre la mesa, coloca una pila de libros de arte y diseño en tonos neutros, un pequeño objeto decorativo abstracto en forma de lazo blanco, y una taza blanca sobre un platillo a juego. La pared opuesta al sofá debe tener una ventana grande cubierta con persianas verticales blancas que filtren la luz natural suavemente. El suelo debe ser de cemento pulido en un tono gris claro, complementando la paleta neutra y moderna del espacio. La iluminación debe ser suave, creando un ambiente relajado y elegante.