Un patio trasero amplio que combina elementos tradicionales y modernos, con una distribución funcional y estética relajada. El espacio está rodeado por paredes de colores neutros y texturas naturales, donde se destaca el uso de revestimiento de piedra en ciertas áreas para aportar una conexión orgánica con el entorno. A la izquierda, se encuentra una estructura auxiliar con techo plano y una pérgola de vigas abiertas que permite la entrada de luz solar, creando un área de sombra parcial. Bajo esta estructura se ubica una tumbona de madera con ruedas, ideal para descansar y aprovechar el espacio al aire libre. El patio central es amplio y está pavimentado con un suelo liso en tonos grises claros que facilitan la circulación y el mantenimiento. En el lado derecho del patio, hay un conjunto de muebles de exterior, compuesto por dos sillas de mimbre y una mesa de centro baja, protegidos por una sombrilla blanca que ofrece sombra en los días soleados. Este rincón invita al relax y la socialización en un ambiente cómodo y acogedor. La vivienda principal, ubicada al fondo, presenta una fachada de dos niveles con techos inclinados cubiertos por tejas en tono rojizo, reflejando un estilo clásico mediterráneo o portugués. Las ventanas son sencillas, enmarcadas en blanco, ofreciendo ventilación y luz natural al interior de la casa. Los elementos arquitectónicos de la vivienda mantienen una estética limpia y funcional, en armonía con el diseño exterior del patio. El espacio está rodeado de vegetación moderada, con pequeñas plantas y arbustos ubicados estratégicamente para no sobrecargar el ambiente, pero aportando un toque de frescura y naturalidad.