La casa futurista inspirada en *Wolverine* combina la intensidad de un entorno de acción con una sofisticación que refleja la fuerza y la resiliencia de su personaje. La estructura tiene una presencia imponente y austera, con líneas angulosas y robustas, como un refugio diseñado para resistir las adversidades. En la fachada, grandes paneles de cristal dorado, cálidos y brillantes, capturan la luz de la luna de manera dramática, iluminando la casa con un resplandor que emula la fuerza interna de Wolverine. Los cristales dorados tienen un acabado metálico, y su superficie reflectante resalta tanto la luz natural como la artificial, generando un contraste vibrante contra la oscuridad de la noche. Los espejos negros, ubicados en secciones estratégicas de la casa, sirven para acentuar el misterio y la intensidad del diseño. Estos espejos absorben la luz, creando un efecto hipnótico que distorsiona y amplifica el entorno, como si la casa estuviera constantemente desafiando su forma y estructura. Al interactuar con los reflejos de los cristales dorados, los espejos intensifican la atmósfera de contraste entre la agresividad de la construcción y la serenidad de su entorno. En el exterior, una piscina de diseño futurista se extiende a lo largo de la propiedad, con bordes irregulares y una superficie que refleja tanto los destellos dorados de la casa como las estrellas del cielo nocturno. El agua es clara, pero en la noche adquiere un tono oscuro, casi negro, que contrasta con los destellos dorados de la luz que se filtra desde el interior. La piscina parece ser un lugar de relajación y de concentración, rodeada de pasarelas de metal que están sutilmente iluminadas por luces suaves que resaltan la arquitectura sin perturbar la serenidad del entorno. A lo largo de la casa y la piscina, los elementos metálicos y las superficies reflectantes trabajan juntos para crear una atmósfera de tensión y poder. La iluminación suave de las luces doradas, combinada con la oscuridad de los espejos y la tranquilidad de la piscina, brinda una sensación de contraste entre la calma y la violencia, como una metáfora de la dualidad de Wolverine. Esta residencia no es solo un refugio, sino un santuario que simboliza la lucha interna y la resistencia, donde la fuerza bruta y la belleza se encuentran en equilibrio.