Un modelo arquitectónico de un mercado típico mexicano con un diseño moderno y tradicional. La cubierta tiene una forma ondulada cóncavo-convexa, con cuatro curvas altas y tres curvas bajas, fabricada con paneles de cobre envejecido que han adquirido un color verde turquesa por oxidación natural. La estructura que sostiene la cubierta es una armadura metálica en color negro, robusta y decorativa, de la cual cuelgan plantas ornamentales, aportando un ambiente natural y acogedor. Los muros son de tabique rojo recocido, dando un toque rústico y auténtico. En las áreas donde no hay muros, se colocan cancelerías de vidrio y aluminio, delimitando los locales comerciales típicos de un mercado mexicano. Personas caminan y compran en el mercado, interactuando entre los puestos. Algunos llevan bolsas de compra o miran productos en los locales. El diseño incluye cubículos rectangulares bien organizados, rodeados por un entorno paisajístico con piso verde. La vista es isométrica, con un fondo oscuro que resalta los detalles estructurales y la actividad humana.