Diseña un rascacielos futurista y orgánico inspirado en la forma de un árbol de Navidad. El edificio está compuesto por viviendas interconectadas, cada una iluminada suavemente para replicar la iluminación tradicional de un árbol navideño. La estructura es predominantemente blanca, con líneas fluidas y suaves que resaltan su diseño orgánico. Está ubicado en Jerusalén, Israel, con la Cúpula Dorada visible en el fondo. Sobre la escena, brilla la Estrella de Belén en el cielo nocturno, realzando el ambiente espiritual y festivo. El concepto combina arquitectura de viviendas verticales con una estética moderna, creando un punto icónico y armonioso