Un edificio residencial contemporáneo compuesto por dos bloques principales separados por un patio central abierto con un jardín minimalista en su interior, destacando un diseño arquitectónico moderno y funcional. La fachada presenta líneas verticales marcadas que aportan textura visual, combinadas con materiales metálicos y paneles estilizados DE LAMINA NEGRA. Las unidades habitacionales están conectadas por pasillos abiertos y balcones con barandales de vidrio transparente, transmitiendo un ambiente de amplitud y modernidad. El patio central sirve como núcleo visual, con una planta ornamental que aporta frescura al entorno urbano. En la entrada frontal, hay un automóvil estacionado y una amplia acera, mientras personas interactúan en el espacio, mostrando actividad y habitabilidad. La paleta de colores es sobria, con tonos neutros como el gris y detalles en verde que equilibran lo urbano con lo natural. El diseño transmite un sentido de armonía entre la estética arquitectónica y la funcionalidad cotidiana