En un rincón remoto del universo, donde los límites entre lo tangible y lo etéreo se desvanecen, existen tres bestias etéreas, guardianas de paraísos formados con elementos de mundos lejanos. Cada una de ellas combina la majestuosidad de los ángeles con la mística oscuridad de las estrellas olvidadas, y su presencia marca el equilibrio perfecto entre la luz y la sombra.
Seraphis, la Bestia de Cristales Celestiales
Un ser angelical con alas resplandecientes hechas de cristal puro que reflejan todas las constelaciones de galaxias perdidas. Su cuerpo está formado por una amalgama de luz líquida que se adapta y brilla con el flujo de energía cósmica. Los vientos que soplan a su alrededor transportan fragmentos de meteoritos y asteroides que, al tocarlos, se transforman en jardines etéreos, con plantas que emanan una luz suave pero penetrante. Su tarea es guardar el portal entre los reinos de luz y la oscuridad, equilibrando la serenidad celestial con la fuerza de la indiferencia cósmica.
Umbrosia, la Bestia de Sombras Estelares
Con alas negras que absorben la luz, Umbrosia es una criatura de la oscuridad que ha nacido de las sombras profundas de las nebulosas. Su cuerpo está cubierto de una piel de ébano líquido, y su mirada, brillante como estrellas moribundas, puede someter la voluntad de los seres más fuertes. En sus pasos, deja atrás tierras volcánicas y océanos de cenizas, pero al mismo tiempo, crea bosques de plantas de fuego que iluminan su entorno en la más absoluta quietud. Umbrosia es el equilibrio en sí misma, una bestia que cosecha la oscuridad para traer orden y protección a los paraísos silvestres donde la luz de otras bestias aún no puede llegar.
Lunaria, la Bestia de la Aurora Cósmica
Luminosa y etérea, Lunaria se manifiesta como una serpiente gigantesca, cuyas escamas son destellos de auroras boreales, cambiando de color constantemente. Su forma resplandece en tonos iridiscentes, mientras arrastra una estela de polvo estelar que crea nubes de energía cósmica que se convierten en plataformas flotantes. Su dominio es un jardín suspendido en el vacío, donde los árboles nacen de meteoritos que caen suavemente y las criaturas se alimentan de luces capturadas de lejanos soles moribundos. Es la guardiana del equilibrio entre las estaciones y las fases de la luna, protegiendo la armonía entre el caos y el orden.
Estas tres bestias etéreas viven en sus respectivos dominios, vigilando los elementos de los planetas silvestres y buscando siempre un balance entre la luz que los crea y la oscuridad que los protege. Solo aquellos que logren comprender su dualidad podrán acceder a los secretos de los paraísos interplanetarios que guardan.
En un rincón remoto del universo, donde los límites entre lo tangible y lo etéreo se desvanecen, existen tres bestias etéreas, guardianas de paraísos formados con elementos de mundos lejanos. Cada una de ellas combina la majestuosidad de los ángeles con la mística oscuridad de las estrellas olvidadas, y su presencia marca el equilibrio perfecto entre la luz y la sombra.
Seraphis, la Bestia de Cristales Celestiales
Un ser angelical con alas resplandecientes hechas de cristal puro que reflejan todas las constelaciones de galaxias perdidas. Su cuerpo está formado por una amalgama de luz líquida que se adapta y brilla con el flujo de energía cósmica. Los vientos que soplan a su alrededor transportan fragmentos de meteoritos y asteroides que, al tocarlos, se transforman en jardines etéreos, con plantas que emanan una luz suave pero penetrante. Su tarea es guardar el portal entre los reinos de luz y la oscuridad, equilibrando la serenidad celestial con la fuerza de la indiferencia cósmica.
Umbrosia, la Bestia de Sombras Estelares
Con alas negras que absorben la luz, Umbrosia es una criatura de la oscuridad que ha nacido de las sombras profundas de las nebulosas. Su cuerpo está cubierto de una piel de ébano líquido, y su mirada, brillante como estrellas moribundas, puede someter la voluntad de los seres más fuertes. En sus pasos, deja atrás tierras volcánicas y océanos de cenizas, pero al mismo tiempo, crea bosques de plantas de fuego que iluminan su entorno en la más absoluta quietud. Umbrosia es el equilibrio en sí misma, una bestia que cosecha la oscuridad para traer orden y protección a los paraísos silvestres donde la luz de otras bestias aún no puede llegar.
Lunaria, la Bestia de la Aurora Cósmica
Luminosa y etérea, Lunaria se manifiesta como una serpiente gigantesca, cuyas escamas son destellos de auroras boreales, cambiando de color constantemente. Su forma resplandece en tonos iridiscentes, mientras arrastra una estela de polvo estelar que crea nubes de energía cósmica que se convierten en plataformas flotantes. Su dominio es un jardín suspendido en el vacío, donde los árboles nacen de meteoritos que caen suavemente y las criaturas se alimentan de luces capturadas de lejanos soles moribundos. Es la guardiana del equilibrio entre las estaciones y las fases de la luna, protegiendo la armonía entre el caos y el orden.
Estas tres bestias etéreas viven en sus respectivos dominios, vigilando los elementos de los planetas silvestres y buscando siempre un balance entre la luz que los crea y la oscuridad que los protege. Solo aquellos que logren comprender su dualidad podrán acceder a los secretos de los paraísos interplanetarios que guardan.