Este diseño arquitectónico presenta un acceso que se adapta de forma orgánica al terreno y permite la circulación por un pequeño cerro, empleando materiales naturales que armonizan con el entorno. Las gradas están construidas en concreto texturado y se dividen en tres sectores distintos que aseguran una transición suave y visualmente integrada con el paisaje circundante. Sector Superior (Sector Horizontal): En la parte superior del diseño, se halla un tramo de gradas casi horizontal, delimitado por un muro de ladrillo cerámico de 25x12 cm que ofrece una estructura visual robusta y rústica. Este muro, además de definir el límite superior, complementa la estética natural del diseño. Al final de este muro de ladrillo, en la parte superior derecha, se ubica una puerta metálica compuesta de tubos cilíndricos y malla olímpica tupida, que marca el inicio de un cerramiento de malla olímpica sostenida por postes de hormigón pretensado ubicados cada 3.5 metros. Este cerramiento sigue el descenso del terreno, bordeando el tramo de gradas del sector derecho. Sector Izquierdo: Las gradas del sector izquierdo descienden en una forma curva y orgánica desde el tramo superior, fusionándose naturalmente con la base del cerro. Su geometría sigue un diseño de ángulos suaves y curvas que se adaptan a la pendiente del terreno, permitiendo un acceso cómodo y estético. Estas gradas de concreto texturado están acompañadas de un muro de contención de piedra rústica que refuerza el cerro y aporta un acabado visual de textura natural. A lo largo de este sector, setos y plantas delinean los bordes, creando una transición visual que se fusiona con el paisaje circundante y acentúa la conexión entre la estructura y el entorno natural. Sector Derecho: Las gradas del sector derecho también descienden desde el sector horizontal superior, pero en este caso, el diseño presenta líneas más angulares y rectas que dirigen el recorrido hacia el pie del cerro. La textura del concreto en estas gradas complementa la estética rústica del diseño. Al igual que en el sector izquierdo, un muro de contención de piedra rústica sostiene el terreno, y el borde de las gradas está delineado por setos y plantas. Este sector está rodeado por el cerramiento de malla olímpica que desciende siguiendo la pendiente, proporcionando seguridad sin interferir con las vistas. Fusión con el Paisaje y Detalles Naturales: En todo el recorrido, el muro de contención de piedra rústica, junto con los setos y plantas, contribuye a que los espacios de circulación se integren naturalmente con el entorno. Este diseño rústico y texturizado ayuda a estabilizar el terreno y a la vez define el trayecto con una estética que emula la naturaleza. Al pie del cerro, una fila de árboles frutales complementa el paisaje, ofreciendo un toque de verdor y vida al diseño. Estos árboles están bordeados por un canal de drenaje pluvial sutilmente integrado, que asegura un manejo adecuado del agua en días de lluvia sin alterar la armonía del diseño natural.