Un espacio de diseño de interiores revolucionario, concebido como una obra de arte habitable, donde los tonos moca fluye como un hilo conductor a través de formas orgánicas y curvas dinámicas que desafían la simetría tradicional.
La bañera independiente, de diseño escultórico llena de agua con espuma desprende vapor del agua caliente, se sitúa como un punto focal enmarcado por un ventanal de altura completa, rodeada de plantas de hoja ancha que integran la naturaleza en el espacio de manera fluida.
El vestidor, un espacio sinuoso y envolvente, presenta superficies en madera oscura y acabados moca, iluminados estratégicamente para acentuar las texturas y líneas curvas que evocan movimiento. La cama, enmarcada por un cabecero asimétrico y escultórico, se enfrenta a una televisión integrada en una pared fluida, casi líquida, que redefine el concepto de funcionalidad estética.
La sala de estar combina un sofá ergonómico con un par de sillones que parecen flotar, diseñados en tonos moca profundo y detalles metálicos, acompañados por una mesa de centro con líneas geométricas inspiradas en la naturaleza. La iluminación es un espectáculo en sí misma, con luminarias futuristas que proyectan sombras artísticas, realzando las formas orgánicas del espacio.
Este diseño, que fusiona calidez, funcionalidad y una arquitectura visionaria, transforma la experiencia cotidiana en un viaje sensorial y redefine el lujo contemporáneo.
En el suelo haytirados petalos de rosa a modo de alfombra.
Un espacio de diseño de interiores revolucionario, concebido como una obra de arte habitable, donde los tonos moca fluye como un hilo conductor a través de formas orgánicas y curvas dinámicas que desafían la simetría tradicional.
La bañera independiente, de diseño escultórico llena de agua con espuma desprende vapor del agua caliente, se sitúa como un punto focal enmarcado por un ventanal de altura completa, rodeada de plantas de hoja ancha que integran la naturaleza en el espacio de manera fluida.
El vestidor, un espacio sinuoso y envolvente, presenta superficies en madera oscura y acabados moca, iluminados estratégicamente para acentuar las texturas y líneas curvas que evocan movimiento. La cama, enmarcada por un cabecero asimétrico y escultórico, se enfrenta a una televisión integrada en una pared fluida, casi líquida, que redefine el concepto de funcionalidad estética.
La sala de estar combina un sofá ergonómico con un par de sillones que parecen flotar, diseñados en tonos moca profundo y detalles metálicos, acompañados por una mesa de centro con líneas geométricas inspiradas en la naturaleza. La iluminación es un espectáculo en sí misma, con luminarias futuristas que proyectan sombras artísticas, realzando las formas orgánicas del espacio.
Este diseño, que fusiona calidez, funcionalidad y una arquitectura visionaria, transforma la experiencia cotidiana en un viaje sensorial y redefine el lujo contemporáneo.
En el suelo haytirados petalos de rosa a modo de alfombra.